DÍA SOLIDARIO. Deja volar tu solidaridad
Moncho Ferrer, director programas Fundación Vicente Ferrer: “Las empresas españolas no pueden pensar sólo en el dinero si sale o lo ganan a través de un niño”.
“El dinero no vale nada si sale del trabajo de niños de diez años […] Hay una mafia que compran niñas de 13 ó 14 años y luego la venden y las ponen a trabajar”. De esa forma tan clara, contundente y directa levantó la voz Moncho Ferrer, director de Programas de la Fundación Vicente Ferrer, ante los micrófonos de Canarias 7.7 Radio y en el programa de la periodista Teresa Cardenes.
Moncho Ferrer, hijo de Ana y Vicente Ferrer, se trasladó el pasado día 5 de junio a Las Palmas para apoyar las iniciativas y trabajo que están llevando a cabo los miembros de la Fundación Vicente Ferrer en Gran Canaria. El número de socios colaboradores canarios ya ha alcanzado la cifra de 5.000 y “todos los años suelen viajar a la India un grupo de 20 ó 30”, según explicó Moncho.
Ante la difícil situación económica que estamos viviendo la presidenta y directora de la Fundación también ha denunciado que “la lucha contra la pobreza, contra el hambre, es quizás la más difícil de todas las luchas. Todos sabemos cuál es el antídoto pero, por desgracia, nunca llega en el momento ni la cantidad suficiente”.
Anna Ferrer, que junto a Vicente creó la Fundación hace 40 años en Anantapur, subraya que “un tercio de los habitantes de la India viven bajo el umbral de la pobreza”. Y va aún más lejos cuando recuerda que “quienes están en disposición de cambiar esta situación no están invirtiendo los esfuerzos necesarios”. La viuda de Vicente y madre de Moncho evoca las palabras del fundador: “Vicente decía que ayudar no es dar dinero, sino amistad, amor y generosidad”.
Entre las muchas iniciativas de la Fundación Vicente Ferrer destaca la última que Anna ha puesto en marcha: “De mujer a mujer”, que intenta mejorar las condiciones de vida de miles de mujeres que viven en la India rural. En este programa se han involucrado destacadas mujeres españolas como las actrices Maribel Verdú, Blanca Portillo y Ema Ozores, la cantante Luz Casal, las periodistas Ana Pastor y Montserrat Domínguez y la directora de cine Gracia Querejeta.
Moncho Ferrer plantea que “el objetivo fundamental de la Fundación es conseguir que tengan herramientas para que vivan de manera independiente” y que la mayoría de los esfuerzos están dirigidos a los campos de la educación, sanidad y vivienda”.
Los socios colaboradores de la Fundación Vicente Ferrer ya han conseguido llevar a cabo, con sus aportaciones y campañas, durante os últimos cuatros años varios proyectos en la India. Entre ellos están la construcción de 106 viviendas, dos escuelas, una clínica rural, una planta potabilizadora, 102 bicicletas para que las niñas puedan acudir a los institutos, centros residenciales para niños con discapacidad, telares y sistemas de riego por aspersión.
Y el próximo día 1 de julio también se llevará a cabo el “Día solidario de los trabajadores de AENA”. La idea ha sido promovida por los controladores aéreos y consiste en donar el valor económico de un día de trabajo a la Fundación Vicente Ferrer.
Moncho Ferrer, tras los sucesos ocurrido en alguna fábrica textil de Bangladesh donde murieron varios trabajadores y después se supo que esos centros servían a empresas españolas, denuncia y alerta sobre esa práctica que utilizan algunas empresas y cómo deberían actuar: “Las empresas tienen la obligación de exigir que se trabaje con unos valores mínimos”.
Y recuerda Moncho: “En la India, según ley, nadie puede trabajar con menos de 14 años, pero trabajan. Las empresas, desde España, tienen que indicar que no están dispuestas a trabajar y fabricar con gente que tenga 10 ó 12 años. Tienen que decirlo fuerte y muy claro. Tiene que producirse un rearme ético”.
El hijo de Vicente y Anna, los creadores de la Fundación Vicente Ferrer, sentencia y envía un mensaje a la conciencia de algunos prósperos empresarios: “La empresas no pueden pensar sólo en el dinero, pues el dinero no tiene valor si sale o lo ganan a través de un niño”.
Por último, Jordi Forgado, director de la Fundación en España, hace una alabanza a los colaboradores de nuestros país y a la labor que está llevando a cabo Caritas con los bancos de alimentos y recuerda: “No hay pobres de primera y de segunda. Hay personas que sufren y eso puede ser un boomerang porque nadie puede sufrir eternamente”.